viernes, 31 de octubre de 2008

Tejiendo futuro

Víctor M. Quintana S. en un artículo de la Jornada de hoy, 31 de octubre (Maputo responde a Wall Street) nos habla del “sistema alimentario comunitario y local, manejado totalmente por sus actores: las familias campesinas e indígenas, con toda su diversidad de edades, de sexos, de roles. Todos ellos y ellas identificados como productores y consumidores. Producen sus alimentos con base en sus propias semillas, mejoradas por la prácticas autóctonas de selección y cruza de las mejores. Con lo que producen constituyen una reserva estratégica de alimentos con fines no sólo de satisfacción de necesidades materiales, sino también sociales y simbólicas. Reserva que les permite alimentar solidariamente a los viejos solos, a los enfermos, a las personas con discapacidad, celebrar sus fiestas, integrar la comunidad. Reserva con la que no se especula, ni se lleva a la bolsa de Chicago, ni se tasa según el mercado de futuros, ni escapa de las manos de los productores directos para pasar a la de los financieros. La soberanía alimentaria local está compuesta de granos que no son mercancía, sino garantía de derechos básicos, de satisfactores esenciales.”

Todavía hay miles de campesinos mexicanos que hace eso. Hay indígenas que lo hacen no por necesidad, sino por elección conciente.

Quien teje así su trabajo está tejiendo futuro.

jueves, 30 de octubre de 2008

De otro blog

Acabo de leer un extraordinario artículo en el blog http://senocri.blogcindario.com. Nos habla de la persistencia morisca en España y de la sensatez de quienes están redescubriendo el valor de todo lo moro, tan presente en España y que nos llega acá, a México.

Al leerlo no pude dejar de pensar en mis hermanos indígenas, a quienes también se ha tratado de expulsar de sus territorios, de hacerlos olvidar su lengua, sus costumbres, su interpretación del mundo y su relación con él. Al igual que en otras latitudes, lo más valioso que tenemos ahora en México es el ejemplo de esos nuestros hermanos que en silencio, en la sombra, siguen construyendo su mundo, siguen haciendo cultura, su cultura, persistentes, tenaces, tras haber rescatado su dignidad con una guerra declarada que todavía no termina. No hablan, no se notan, pero viven y actúan.

viernes, 24 de octubre de 2008

¿Qué vieron abajo los de arriba para tener tanto miedo?

Lugar: México, D.F.
Fecha: jueves 23 de octubre de 2008 (ayer)
.
En el autobús que aparece atrás viajan senadores de la República, legalmente representantes populares. Se dirigen a una sede alterna de Senado, para aprobar algunos dictámenes relacionados con la reforma petrolera. Las fuerzas policiacas, dirigidas por el propio Secretario de Seguridad Pública los van protegiendo ¿De qué?, ¿de quienes?
.
Las notas relativas aparecen en cualquier periódico de circulación nacional editado hoy.



martes, 21 de octubre de 2008

¿Costales de cocos?

José Ignacio Sáenz de la Barra mandó al Patriarca lo que éste supuso costales de cocos en abundante número y durante mucho tiempo. Arrumbados tras las puertas y en los rincones del palacio presidencial, al fin lo inundaron con sus emanaciones pestilentes. Los supuestos cocos no eran tales, sino cabezas humanas.
.
García Márquez conoce bien nuestra América. Apenas ayer o antier llegaron a la presidencia municipal de Ascención, Chihuahua, por paquetería, cuatro cabezas en una hielera; bien, no fueron costales, pero es igual. La novela que prefigura estos hechos inicia con la muerte del patriarca ¿Quién es ahora el patriarca y cuándo morirá?, ¿quién es José Ignacio Sáenz de la Barra?
.

Una golondrina no hace verano

Pero si vuela con elegancia e ingenio, al menos alegra el día invernal.

Acabo de leer la noticia: en un acto al que asistía el presidente Felipe Caldrón, en León Guanajuato, el Estado Mayor Presidencial obligó a un joven a quitarse una playera con la palabra "Espurio". Tras varios intentos de resisencia el joven se quitó la playera; abajo traía otra con la leyenda "¿Oportunidades?.
.
La nota no dice más ¿También lo obligaron a quitársela?

viernes, 17 de octubre de 2008

Basta hundir el remo

El cielo está cargado de nubarrones. Ninguna estrella a la vista. El viento hace galopar las nubes que descargan su energía en relámpagos continuos. La luz momentánea permite ver las olas que amenazan arrastrar y subvertir todo lo que encuentren. Quien boga, con mucho miedo pero con terquedad, sumerge el remo procurando no perder el equilibrio. Una corriente profunda se aproximan a la superficie, aflora aquí y allá, bate el remo y conforta al remero. La dirección de la corriente parece firme, el galeote no puede saber si permanecerá el movimiento en esa dirección, pero sus estrellas internas recobran un tembloroso brillo. El rumbo de su navegar parece correcto.
.
En medio de la tormenta escribe en el cuaderno de bitácora: profesores procedentes de Baja California, Querétaro, Zacatecas, Michoacán, Oaxaca, Chiapas y Guerrero marcharon hoy en el Distrito Federal defendiendo la educación pública, gratuita, popular y democrática. Se iniciarán paros indefinidos escalonados, afirmaron los voceros. Quien escribe en el cuaderno de bitácora añade: los tanques no han asustado a estos profesores; en las escaramuzas con la policía no intervino esta vez el ejército.

jueves, 16 de octubre de 2008

Abajo hay resitencia



Para esta fecha los maestros del estado de Morelos ya tienen algo así como dos meses en paro laboral. Defienden una educación democrática y popular que la globalización pretende, en México, hacerla elitista y que la iniciativa privada la vaya penetrando y asumiendo responsabilidades que actualmente tiene el estado.

Aunque los maestros no dan clases, los padres de familia los apoyan. La lucha se prevé larga. En su desesperación, alguna autoridad importante solicitó la intervención del ejército mexicano que en apoyo de las policías federales y estatales participó en la represión de población civil compuesta principalmente por padres de familia. La fotografía que encabeza este escrito – aunque cuete trabajo creerlo – corresponde a las acciones mencionadas.

Las reacciones de arriba indican lo que pasa abajo: dos días después de lo sucedido, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional Guillermo Galván Galván, declaró ante diputados federales que “en relación con lo que está sucediendo en Morelos [ … ] está consciente de que la solicitud expresada por la propia PFP de apoyo para (reprimir al pueblo) es una cuestión de altísimo riesgo para el Ejército, en el sentido de que se puede interpretar en otro sentido la solicitud de apoyo.” Tres días después, apenas ayer, la titular de la Secretaría de Educación Pública Josefina Vázquez Mota, declara también ante diputados que ya inició la contratación de esquiroles (no los llamó así, aunque eso sean) para que den clase en Morelos. Los maestros mantienen el paro, en tanto en otros estados de la república hay movilizaciones magisteriales en apoyo a los huelguistas morelenses.

domingo, 12 de octubre de 2008

¿El mar en calma?

Lo que vemos los simples mortales cuando llegamos al mar es sólo la superficie. Quien vive del mar, o en él, con solo eso intuye lo que hay abajo.

En la sociedad mexicana lo que vemos los citadinos es la televisión, la superficie pues, y los periódicos, si acaso. Quien está atento, con eso intuye lo que se mueve abajo.

Por ahora empiezan a emerger señales en sucesión inusual: un líder indígena se prende fuego ante la tozudez de un gobierno estatal. Fuerzas policíacas asesinan a tres heridos por ellas mismas y matan a quien sólo los transportaba a un hospital, balaceándolo frente a su esposa; sin embargo los indígenas no abandonan la lucha por la que fueron reprimidos. El ejército mexicano – esperemos que solamente una parte –, sin mediar declaración de guerra, inicia una, abierta y clara, contra población civil mexicana que apoya a los maestros de sus hijos. Los maestros siguen en rebeldía, a pesar de los tanques.

Ahí están algunos signos, ¿qué pasa abajo? La superficie no lo dice. El que quiera y pueda, que piense con cabeza propia.

sábado, 11 de octubre de 2008

Chinkultic

La noticia saltó a los periódicos: el 3 de octubre fuerzas policíacas federales (PFP y AFI), apoyados por policías estatales, desalojaron violentamente a campesinos indígenas que estaban en posesión y administrando el sitio arquelógico mayas de Chinkultik, en el estado de Chiapas.

Los policías dispararon sobre la población civil indefensa. Cuando un vecino de otra población transportaba solidariamente en su camioneta a tres heridos graves, fue detenido en la carretera que lleva a Comitán. Los policías que lo detuvieron lo asesinaron a balazos tras rematar a los heridos. De todo ello fue testigo la esposa del chofer, que lo acompañaba y llevaba en brazos a su hijo de tres años. La señora se salvó porque un uniformado le indicó: “Señora, métase a la cabina, yo la cubro; soy padre y tengo hijos”. Hubo heridos, la prensa del 5 de octubre habla de diez. Los muertos fueron más, totalizando al menos seis.

Parecería que no hay más, pero la señal que me da fuerza para seguir bogando, la encontré espigando en la narración de los hechos que hizo durante algunos días un periódico nacional. Los pobladores de Miguel Hidalgo, en cuyos terrenos ejidales está el antiguo centro ceremonial de Chinkultic dijeron que “ahora más que nunca” pelearán porque la zona arqueológica sea administrada por el ejido. “Ya está más que pagada con seis vidas”.

Las cursivas son textos sacados del periódico La Jornada.

Las corrientes marinas

No soy experto en fenómenos marinos, pero algo se oye alguna vez o se obtiene del saber común. Resulta que desde mucho tiempo antes que los europeos se toparan con América, una corriente marina indispensable para que Inglaterra fuera habitable, la actualmente llamada Corriente del Golfo, llevaba a las costas inglesas, bajo la superficie del Atlántico, agua templada con la energía térmica adquirida en este continente, tan viejo como aquél, evitando que el Mar del Norte comunicara sus temperaturas cercanas a los cero grados al asiento del reino unido anglosajón. Algo parecido sucedía ya en las costas americanas del Pacífico con otra corriente que, desde las aguas de Centro América, permite desde hace mucho tiempo que la bahía donde actualmente está Vancouver tenga temperaturas menos heladas que otros puntos con la misma latitud.

Total: bajo de la superficie marina, ya esté en calma o movida por tormentas tropicales, huracanes, monzones o como se les llame, se mueven fuertes corrientes que le dan rostro al mundo que conocemos. En el mundo físico eso pasa ¿Por qué no habrá de pasar en el social?

La superficie social podrá estar en calma. Algunos pensarán que nada cambia ¡Que nada puede cambiar! “¡La gente es tan conformista!”

La superficie se agita mientras las ondas de la televisión permanecen en el aire con la noticia conmovedora, pero apagado el televisor todo parece volver a la calma de lo eterno. En el fondo un maremoto se puede estar gestando, o corrientes bien definidas puedes avanzar y acercarse al lugar a donde apuntan. Desde nuestras rocas, aparentemente inmóviles, podemos otear esas señales. Conviene que estemos preparados.

viernes, 3 de octubre de 2008

Ramiro Guillén Tapia


Momento en que un socorrista trata de extinguir el fuego con el que se inmoló el campesino popoluca RamiroGuillén Tapia.
La nota completa puede consultarse en la siguiente liga:

Las estrellas ¿se alejan o nos acercamos a ellas? Segunda parte: La terca realidad

La tozuda realidad, mata, destruye, aniquila. También destraba problemas irresolubles.

Hace unos días – el primero de octubre – un indígena, líder campesino, sin avisar a nadie, ni a sus compañeros de lucha, se prendió fuego en una plaza pública de Jalapa, Veracruz. Murió ayer a causa de las quemaduras.

“Lo hice porque no sirve el gobierno, sólo son engaños y yo tenía que responder a mi pueblo popoluca”, alcanzó a declarar cuando extinguieron el fuego.

En un acto desesperado, para no dar la espalda a sus hermanos, el indio prefirió morir gritando su rebeldía. No quiso llorar desesperanzas.

Cada persona que conozca el suceso lo juzgará según le dicte su conciencia o su conveniencia externa, pero se moverán muchas voluntades, ¿cuál será su despertar?, ¿cuál el cauce que tomen las agua agitadas?

En el mar en que navego, las olas se encrespan con el hecho.